miércoles, 17 de agosto de 2011

#Caravanamx : Cuando el miedo y el dolor entrelazan a México

Gustavo Sánchez B.
Foto 1 y 3: Diego Mateos
Más que los cambios de clima, caminos largos, el cansancio físico, lo que pesa son los muertos con nombre, apellido y familia, que salen a la luz en el transcurso de la primera Caravana por la Paz, que en junio encabezó el poeta Javier Sicilia, a quien le asesinaron a su hijo, Juan Francisco.

Y es que cuando ya se expuso una historia horrible, alguien cuenta otra peor. Son las madres, los padres, hijos, hermanos, familiares pues, de los que fueron asesinados en alguna parte de la extensa geografía del terror que se ha vuelto México en menos de cinco años. Quienes quieren ser escuchados, suben a un templete, toman el micrófono y comienzan a contar su tragedia. Mientras, a otros dolientes los encontramos con una cartulina y el corazón en la mano, recordando a su o sus muertos, en alguno de los estados que visitamos: Michoacán, San Luis Potosí, Zacatecas, Durango, Coahuila, Monterrey y Chihuahua.

Distrito Federal, 4 de junio del 2011.-Con el Ángel de la Independencia como testigo, habla Javier Sicilia: “Queremos, con nuestro consuelo mutuo, con esto de estar juntos en la soledad del otro, de todos nosotros que somos dolientes, tocar el corazón y la conciencia de la inhumanidad de los criminales y el desdén de los gobernantes…”.
El poeta hoy viste como casi siempre: pantalón de mezclilla gastado, playera blanca como última capa, chaleco beige de pescador, sombrero texano y, lo infaltable, las botas de motociclista que le compró su hijo, además de la chamarra café de borrega que también le regaló Juan Francisco, la cual usa ahora pese a que la mañana está bañada de rayos de Sol.
No. No olvida la poesía: “Nuestro corazón está brotando flores a mitad de la noche, el corazón herido responde al dolor con flores que son formas del amor, del consuelo –como le he llamado a esta caravana- de la unión, del estar con la soledad de los otros y es la respuesta a la noche que nos han impuesto en esta guerra…”.
A su vez, con su peculiar acento norteño, el líder menonita Julián Lebaron dice: “La cuenta de sangre es demasiado grande; el color rojo se acumula en el piso y comienza a borrar nombres, apellidos, vocaciones, edades, sexos, clases sociales y color de piel”. Y hoy, como desde que empezó este movimiento, Lebaron recuerda a su hermano, Benjamín, y la de su amigo, Luis Whitman, asesinados en el municipio de Galeana, Chihuahua.
Luego de los discursos, la gente comienza a llenar los autobuses. Al viaje, se suman personajes como Arturo Reyes Isidro, “el señor árbol”; José Ortiz Urenda, quien da vida al Miguel Hidalgo; un hombre que representa a Emiliano Zapata; Yayo, el mimo de la nariz roja; en total son aproximadamente trescientos ciudadanos, más unos cien reporteros. Una tribu entrelazada por el miedo. Y el dolor.

Morelia, Michoacán, 4 de junio del 2011.- En el horizonte, cae el Sol. Bajamos del autobús para recordar y caminar. Recordar que en este estado, en diciembre del 2006, Felipe Calderón Hinojosa inició la guerra contra el narcotráfico. Caminar unas cuantas cuadras del Centro Histórico, en el que como parte de su historia está el 15 de septiembre del 2008, cuando fue detonada una granada la noche del Grito de Independencia en la plaza Melchor Ocampo, por lo que murieron ocho personas.
Hacia esa plaza avanza la Caravana.
Al templete, colocado frente al Palacio de Gobierno, invitan a subir a los dolientes. En un rato, se llena de cuerpos, de pancartas y llanto. Como el de María Herrera quien se presenta como “una madre destruida por el dolor”, al tener desaparecidos a sus cuatro hijos, Jesús, Raúl, Gustavo y Luis Armando, oriundos de Pajacuarán, donde, por cierto, reportan a una veintena de personas “levantadas”.
En el escenario, se sueltan más reclamos. Es una lista, un recuento de los daños paralelos a los muertos del sexenio calderonista: el michoacanazo, los levantones, la aparición de la Familia Michoacana, la lucha de los indígenas de Cherán. También aparece la imagen de María Esther Aguilar Cansimbe, una periodista desaparecida desde hace varios meses.
“Esta guerra nos fracturó… No somos nada solos y juntos somos más poderosos que todos los delincuentes. Ésta es una lección de la verdadera democracia, esta solidaridad de estar juntos con nuestros dolores”, asegura Javier Sicilia, frente a más de mil personas congregadas.
Ante ellos, el poeta pide cambiar el grito de “no están solos” por “no estamos solos”. Y esa consigna se suma a otras, como la de “vivos se los llevaron, vivos los queremos”,
Nos penetra la oscuridad de la noche. Pero las luces de la Catedral, y de los edificios  que la rodean, se encienden, e iluminan.
“Tenemos que salir de este infierno y dolor que nos han impuesto”, apuntala.

Rumbo a San Luis Potosí, 5 de junio del 2011.- Avanzamos entre el lago de Cuitzeo, pasamos por el campo fértil, las vacas flacas, las casetas de cobro, hacemos un alto en Irapuato y, por fin, llegamos a la siguiente parada: San Luis Potosí, donde el amarillo de la sequedad y las montañas camufladas, contrasta con el azul del cielo y lo blanco de las nubes esponjadas.
Frente al Teatro de la Paz, el micrófono se vuelve un exprimidor de historias duras, que estrujan. Habla un potosino: "Nos secuestraron a nuestros hijos desde octubre del 2009... ellos estuvieron en la campaña de Fernando Toranzo (actual gobernador de SLP)... nomás nos los desaparecieron... pidieron dinero y lo di... pero no regresaron... me da tristeza que San Luis Potosí esté así... este no es el San Luis que conocí...".
Después de él, habla otro hombre, con lágrimas en los ojos y la voz desgarrada: "Yo no quiero acusar a nadie... pero a vista se ve que nadie va a meter las manos por mi hijo y mi nieto... a ellos me los secuestraron en una fiesta... no sabemos nada de ellos... acudimos a la procuraduría, a la Secretaría de Seguridad y ¿qué recibimos? nada... vengan mañana... íbamos y no nos recibían... lo único que tenemos es a Dios nuestro señor... señores discúlpenme". Y no habla más. Porque ya no puede.
Habla también Sebastián en una lengua indígena. Él mismo se traduce: "Soy gobernador comunitario... nosotros también hemos sido pisoteados... tenemos cuatro, cinco muertitos... nos despojaron de nuestras tierras... en lugar de escucharnos, las autoridades han tratado de callarnos... destruyen nuestra tranquilidad".
Hay más historias. Más gente inolvidable para sus seres queridos, olvidables para las primeras planas. Como Martín Herrera Ramos, quien cumple un año de haber sido asesinado. Recuerdan además a la degollada Saraí Mendez. También a Manolo, a quien "levantaron" en su propio negocio. Hablan de Edmundo Nava, a quien mataron el 28 de mayo del 2007.
Un señor de avanzada edad trata de llegar hasta el templete y lo logra. Sólo quiere que dejar la foto  de su hijo, Eduardo Morán, a quien secuestraron el 24 de enero de este año. El orador la recibe  y la enseña a las más de trescientas personas presentes.
Después de que se exponen a tantos muertos, en alguna parte de su discurso, Javier Sicilia menciona a Felipe Calderón, cuando a botepronto llueven mentadas de madre. Silbidos. El poeta se encabrita; son los minutos más tensos en lo que va de la Caravana. "¡No alimentemos el odio!... la paz no se hace mentando madres”, sostiene en la Plaza del Carmen. Después de que algunos increpan sus dichos, el grito de "unidad, unidad, unidad" se impone. Para el final, unos minutos de silencio. Luego abrazos. Y, con ellos, el consuelo para un San Luis desencajado.

Zacatecas, 6 de junio 2011.- Las estrechas calles del centro de Zacatecas se llenan fácilmente con el paso de los caravaneros. Al verlos, la gente sale de sus comercios e, incluso, se asoma por sus balcones para simplemente ver o aplaudir la manifestación.
En ese andar, Sicilia valora esta manifestación: "Creo que este momento es fundamental: recuperamos nuestro territorio, el territorio de todos... en una de las habitaciones de esta gran casa llamada México; Zacatecas es una de esas habitaciones... y es una alegría, en medio del dolor, ver a tanta gente en la calle, unida y exigiendo una dignidad, justicia y paz".
En entrevista, el poeta lamenta el allanamiento al centro de derechos humanos Paso del Norte, en Ciudad Juárez, hecho por la Policía Federal, lo cual ocurre de manera paralela a la Caravana por la Paz.
"Le pedimos al presidente Felipe Calderón que nos hable directamente... que nos diga si realmente va a escucharnos... para saber a qué atenernos... porque nosotros vamos a seguir con nuestro camino... nuestra caravana... pero que nos diga si va a atender nuestros reclamos... si nos va a brindar seguridad...".
-¿Cuál esperas que sea la respuesta?
"No lo sé, por eso la estoy pidiendo... espero que sea positiva... no espero nada... simplemente mando una pregunta y espero una respuesta... una respuesta convincente... digna de un mandatario... digna del hombre que está al frente del país y de las Fuerzas Armadas...".
-¿Confías en que dé esa respuesta?
"Pues sí, claro que sí... tengo confianza en él... y lo vuelvo a repetir: él y yo nos hemos hablado de corazón a corazón y estoy esperando esa respuesta de ese corazón..."
-¿No te ha hablado por teléfono?
"No, no... pero yo no lo pido personalmente... le pido esa respuesta para la ciudadanía... que se la dé a la caravana... a los agredidos... al padre Óscar, que fue ahora el agredido en el Centro de Derechos Humanos (de Juárez)".
Ya en la plaza de Armas, lugar del mitin de los dolores, habla Ofelia Castillo, una señora vestida toda de rojo, quien rompe en llanto como el día en que se enteró que "levantaron" a su hijo. Su voz desgarrada retumba en el lugar. Desde que se lo quitaron, está destrozada por dentro. Lo que la mantiene firme es la esperanza de algún día poder encontrarlo.
A su vez, Raymundo Romero recuerda a su padre "desaparecido"; el dolor lo consume; pero él no derrama lágrimas; se ha cansado de hacerlo; aunque apenas pueda leer una carta por la voz entrecortada. "Que nos devuelvan a mi padre", exige. Pero no hay destinatario, porque no sabe quién lo hizo ni por qué.
Más horrores, más preguntas. Ni una respuesta.

Rumbo a Durango, 6 de junio 2011.-El miedo se hace presente en el tiempo. Los organizadores apresuran a los caravaneros para salir de Zacatecas y llegar pronto a Durango. El temor es por la carretera. La hora. Quieren que no nos atrape la oscuridad de la noche y los criminales que se mueven en ella.
No obstante, la Caravana va bien resguardada. Elementos de la Policía Federal y las policías estatales la acompañan.
Apenas y se puede descansar unas horas en autobuses. Hay quienes prefieren apreciar el atardecer, o comer, o escribir sus notas, o platicar con el de al lado.
Llama la atención un pueblo llamado "El nombre de Dios", enclavado entre las montañas que esconden al Sol. Casas pobres, familias pobres, tiendas pobres, niños pobres.
Poco antes de las diez de la noche se arriba a Durango. El ánimo no cesa y comienza la primera marcha nocturna desde que inició la Caravana. Esta noche caminan por la calle 20 de noviembre, donde ya los puestos, comercios y tiendas se encuentran cerrados. Cientos de duranguenses se van sumando en el trayecto, hasta llegar a la Plaza de Armas, en el centro.
Ya en el sitio del encuentro, frente a la iluminada Catedral, son más de mil los congregados. Jóvenes y adultos en su mayoría; los primeros gritan, cantan y brincan; mientras, los segundos, cargan con pancartas, llevan a cuesta su duelo, su pesar, su historia.
"A mi padre le hubiera gustado estar aquí... pero lo mataron el sábado", se lee en el cartel de un duranguense que esta noche no quiere o no puede hablar, solo derrama lágrimas.
En el templete, comienzan a hacer denuncias de personas secuestradas. Madres, hijos, hermanos, padres... todos, con un dolor a cuestas. O con el miedo a flor de piel, olvidado un poco.
"No se me perdió una vaca... a mí se me perdió un hijo...", suelta una madre envuelta en lágrimas.
Al respecto, exigen en una carta: "La identificación de todos los cuerpos encontrados en las fosas clandestinas; la inmediata detención y el esclarecimiento de los responsables de las matanzas cometidas; y acciones inmediatas que terminen con la impunidad y la ilegalidad de los elementos de las corporaciones policiacos de todos los órdenes de gobierno".
Una esposa le llora a su marido desaparecido.
En este lugar, se forma una especie de rompecabezas de consuelo. Y es que Fernando Francisco, de 6 años, esperó cinco horas el paso de los peregrinos con el retrato de su padre en mano, para encontrarse con Sicilia. El poeta lo vio, lo cogió en brazos y sus lágrimas se entremezclaron. Uno sin padre, otro, huérfano de su propio hijo.

Rumbo a Saltillo y Monterrey, 7 de junio del 2011.- La noche pasada en una humilde escuela de Durango apenas y reconfortó los cuerpos fatigados. Y nadie pensó que éste sería de los días más largos.

En la carretera, hacemos un alto. Este podría ser un baño público cualquiera: no tan pulcro, con ese distintivo olor a orina y con inscripciones que invitan a tener sexo. Empero, en un mensaje escrito en una parte del cubículo que aparta a una de las tazas de baño, se lee lo siguiente: “El narco: es el dólar mexicano pero los muertos de hambre de los Z son una maña de cobardes pokiteros robapaleteros y asaltapobres Por eso arriba el Chapo!!! (él si ayuda al pueblo) Si conoces un Z marca el 6562645 pa que lo caguen los perros”.

El baño está ubicado en algún kilómetro de la carretera que conduce a la primera Caravana por la Paz de Durango, Durango a Saltillo, Coahuila, antes de una caseta de cobro –donde se hace un alto debido a una avería de uno de los autobuses.

Y justo al lado del sanitario, está una tienda en la que, luego de llamar varias veces, aparece el hombre que descansaba en la parte trasera, donde hay un aire acondicionado que ayuda a sofocar el inclemente calor.

-¿No tiene cigarros?- pregunta un reportero.

El hombre de unos treinta años, de peculiar acento norteño, señala que no hay ni una cajetilla.

-Desde hace más de 15 días que no me traen…

-¿Por qué? ¿No vende?-, cuestiona una periodista española.

-Es que han bajado mucho las ventas… acaban de correr a dos (empleados)… aquí había tres y ahora solo quedo yo.

La tienda se adapta al paisaje solitario, enclavado entre los cerros de un Durango narco.

No pasa ni media hora, cuando se pasa al estado vecino (Coahuila); los autobuses y coches cruzan el desierto que no tiene divisiones. En el kilómetro 316, se observa a lo lejos un cerro, frente al poblado La Cuchilla, Coahuila, donde se ve una enorme letra de más de seis metros: Z. Es su territorio. Territorio de los Zetas.

La zeta se queda presente en la mente varios kilómetros después. Aún con más mensajes que se ven desde la carretera, como uno que dice “No al heRMano”, en referencia a la obsesión de Rubén Moreira -hermano de Humberto, actual dirigente del PRI- quien busca convertirse en el próximo gobernador de la entidad.

Con dos mensajes queda claro: En Durango, Joaquín Guzmán Loera se ha metido hasta en el baño; mientras en Coahuila, los Zetas han escalado muy alto.

En Saltillo somos recibidos por el obispo Raúl Vera López, quien apoya a la Caravana con unas palabras de aliento y más de mil platos de comida.
Ya de noche, por fin se llega a Monterrey. Inmediatamente después de cruzar la caseta de cobro, se ven policías por todas partes. Federales y ministeriales. Nos custodian hasta llegar a la explanada del Colegio Civil. Ahí se congregan aproximadamente mil personas. Entre ellas, decenas de víctimas.
Una de las que toma el micrófono es la mamá de Juan Alberto José, quien vino de vacaciones y aquí desapareció, por lo que pide a todos "que me ayuden a localizarlo... vivo o muerto".
Desgarrada, nos cuenta: “Nadie me hace caso… por piedad, si alguien lo ha visto, ayúdenme… por piedad”. En eso, se suelta el grito “no estás sola, no estás sola”.
En tanto, otra madre de familia de esta ciudad asegura que las autoridades son en realidad "la delincuencia organizada".
Pese a que faltan unos minutos para que comience un nuevo día, Sicilia anuncia que serán recibidos por el procurador de Justicia de Nuevo León. Y hacia allá avanzan. Caminan ya pocos. Cansados. Pero animados.
En la sede de la Procuraduría, mientras Sicilia y algunos familiares de víctimas se reúnen con el Fiscal del estado para aclarar, por lo menos, 9 casos de desapariciones y asesinatos, los caravaneros cantan y bailan. Espantan el desasosiego. Tratan de olvidar lo cansados que están.

Ya al filo de las dos de la madrugada, en una improvisada conferencia de prensa, el procurador Adrián de la Garza Santos se compromete a hacer las investigaciones pertinentes. Este es, digamos, el primer fruto que deja la Caravana a su paso.

Los quince autobuses se van de la capital con dirección a Santa Catarina, Nuevo León. Pasadas las cuatro de la mañana, los acoge una escuela que, apenas salga el Sol, dará una grata sorpresa.

Rumbo a Torreón y Chihuahua, 8 de junio del 2011.-El sueño duró unas horas. El rumor de las voces de niños levantó a todos. Apenas y uno abría su casa de campaña o se destapaba la cara, y cientos de niños nos miraban, saludaban y reían con nosotros.
Es la escuela Bernardo A. Grousset, enclavada entre las montañas bañadas de Sol de Santa Catarina Nuevo León. Sí, la misma que recibió a los zapatistas hace más de una década.
En entrevista, la directora de esta escuela privada, Mari José Martínez Zambrano, precisó que esta escuela recibió al movimiento zapatista en 1999, aunque en aquel entonces eran muchos menos de los que ahora participan en la Caravana por la Paz.
"Estamos con muchas ganas de que México sea lo que antes era... no sabíamos qué tanto íbamos a poder (recibirlos) pero con muchas ganas lo hicimos... los niños no lo van a olvidar", dijo.
La hora de recreo para los pequeños es un tanto diferente. Algunos, toman una limpia, otros escuchan a los improvisados cantantes, y otros no dejan de observarte.
Cuando los chicos ven una cámara de televisión, gritan, corren y se emocionan con la presencia de los medios de comunicación de México y el mundo, que son parte de la Caravana.
Luego de esta acogida, es hora de partir con destino a Torreón, donde apenas un día antes habían masacrado a trece jóvenes, en un centro de adicciones.
Los caravaneros son recibidos entre lágrimas y una pregunta, literalmente en la boca: ¿Dónde están? En el Parque Venustiano Carranza se cuentan más historias de terror.
Con un clima de más de 40 grados centígrados, familiares cuentan a su o sus desaparecidos que no encuentran y a las que las autoridades simplemente no han ayudado.
"¿Qué puedo hacer yo con la autoridad si no me hace caso?... ¿dónde están? Mi hijo es un muchacho honrado y él dejó su trabajo porque se lo llevaron... pido el apoyo de ustedes para que me traigan a mi hijo y muchas gracias...", dijo primero una madre, con la cara llena de lágrimas y la voz desgarrada.
Luego, otra madre expuso su caso: "Quiero de regreso a mi hijo... yo sé que ustedes me van ayudar... por favor ayúdenme... tiene que regresar conmigo... él está muy apegado a mí... su edad mental es de 12 años... es de lento aprendizaje".
"Ya es preferible no tener gobierno... porque es nuestro peor enemigo", dijo otra madre.
En el lugar, se soltaron palomas en signo de paz, la cual ha caracterizado esta caravana. Después de todo esto, es hora de partir al estado vecino, donde seguro habrá más historias como estas.
Antes de arribar a Chihuahua, la noche nos atrapa. Y con ella, pasamos por pueblos que, por unas horas, dejan de ser fantasma.
Pasar por Camargo y Ciudad Jiménez es conocer verdaderos escenarios de guerra. Donde es casi imposible –hasta hoy- salir a las calles. Los habitantes de ambos lugares aplauden el paso de la Caravana. Su alegría y esperanza se vuelve nuestro entusiasmo para seguir adelante.
Después de la una de la mañana, se llega al Ángel de la Libertad, en pleno centro de Chihuahua. Algo ya ha cambiado: el miedo se esconde cuando la esperanza se pasea por las calles y hace suyas las plazas públicas.

Rumbo a Juárez, 9 de junio del 2011.-Como cada jueves, dos hombres no se cansan de inscribir, con un pico y martillo en mano, el nombre de Marisela Escobedo, justo en el lugar en el que cayó asesinada en diciembre del año pasado, es decir en la entrada del Palacio de Gobierno de Chihuahua, hasta donde corrió en busca de que le brindaran más seguridad que la que tenía en la plaza Hidalgo, del otro lado de la calle, donde mantenía un plantón permanente, en busca de justicia por el asesinato de su hija Rubí.
“No vayas por esa calle… mejor da la vuelta… es que ahí mataron al de la esquina”, refiere la vendedora de burritos, ubicada a una cuadra de la Plaza del Ángel de la Libertad, que se encuentra del otro lado del Palacio de Gobierno de Chihuahua.
Y es que éstas son las calles del terror, por hoy camufladas en un lugar donde se puede caminar tranquilo, gracias a la presencia policiaca, sobre todo de federales y estatales, que se despliegan al frente y a los alrededores de la imponente “casa de gobierno”, ahora encabezado por César Duarte.
Para las amigas de Marisela no hay ningún “nuevo gobernador” cuando trato de encuadrar las fechas de entrada de la actual administración, con la famosa muerte de la activista.
Las amigas de Marisela están justo en el mismo lugar en el que se encontraba ella sola con su demanda, su exigencia de justicia, el imborrable asesinato de su Rubí.
Desde el improvisado templete, frente al Palacio de Gobierno, Javier Sicilia llama a todos los que tengan un familiar muerto por culpa de la violencia y el caso no sea atendido por el gobierno, vayan y pongan su placa, con pico y martillo en mano. Para que el gobierno no se olvide que esa “casa de gobierno” es en realidad del pueblo. Para que no se olvide lo que buscan: justica. Y si no la hay, que pongan una placa si es necesario, pero que nunca se olvide.
Luego de esto, se parte a Juárez.
La pancarta de una juarense reconforta a cualquiera, pero más, mucho más a la Caravana por la  Paz, sofocada por el calor, agotada por el largo camino de parte de la geografía del terror: “todos son bienvenidos”, se lee. Desde un pequeño cerro en el que hay una iglesia,  ondean banderas, reparten incienso y saludan. Porque eso es Ciudad Juárez hoy. Saludar. Y ver a lo lejos o de cerca este movimiento que rompe de tajo el miedo. Rompe la regla no escrita de no salir a las calles cuando “se haga noche”.
Hay que pasar dos retenes para llegar por fin al epicentro del miedo y del dolor. Por la carretera, en el puente del kilómetro 20, se encuentra incluso a un juarense en silla de ruedas, acompañado por su “señora esposa”  y sus “dos queridas hijas” en el Juárez que esperan que “vuelva a ser como antes”.
“Estoy soñando o vienen sonando campanas”, pregunta una joven juarense a su grupo cercano, en referencia al toque de la campana que se ha escuchado durante todas las marchas por la paz.
-¿Usted es de aquí?- le pregunto a la muchacha.
-Desgraciadamente…
Además, una anciana carga con una pancarta: “Estamos hasta la madre de los secuestros”.
Rumbo a Villas de Salvárcar, gracias al tour del terror ofrecido por el periodista Antonio F. Schroeder –quien conoce a Juárez como la palma de su mano-, se puede saber varias cosas: que los autos amontonados por ahí se usan para pasar droga; que lo más parecido al recibimiento que se le da a la Caravana es cuando se celebró el ascenso del equipo de futbol Indios a la Primera División; que en tal tugurio mataron a tantos; que a esos comercios les cobran “la cuota”; que los juarenses sienten el mismo miedo por la presencia de los policías federales que por los grupos criminales; que “la plaza” se atascó de sangre desde que Joaquín, el Chapo, Guzmán, la quiso sólo para él; que a donde vamos, hay un espectacular parque que el gobierno federal construyó luego de varios estremecimientos ocurridos, por ejemplo con la conocida masacre de 14 estudiantes, a los que en principio Felipe Calderón vinculó con bandas delincuenciales.
El parque de Villas de Salvárcar luce impresionante. Es un oasis en medio de este desierto de tristeza en el que, por el paso de la Caravana, se congregan decenas de habitantes del fraccionamiento del miedo. Son tantas las historias de dolor, que rebasan la madrugada. (…)
“Un grito para que se vaya la tristeza”, pide Julián Le Barón, convertido ya en un pulmón de la caravana. Pide un grito para esto, un grito para lo otro. Muchos gritos hasta vencer el miedo. Hasta pasar las tres de la mañana.



Ciudad Juárez, 10 de junio del 2011.- En el campo algodonero, donde encontraron mujeres asesinadas, las madres claman justicia para sus hijas muertas. “Desde este campo exigimos al gobernador, al presidente municipal, a la Fiscalía y a los policías que dejen de humillar a los juarenses”, exige Sicilia. “
Caminar por aquí es darse cuenta que el algodón se terminó porque brotó la sangre. Y el miedo también.
Se avanza.
Un señor en silla de ruedas, otro con sombrero, otro durmiendo; una mujer tomando un agua fresca, otra muy atenta, otra tomando fotos; varios jóvenes, varios viejos; son más de doscientas personas, varios juarenses, y por lo menos uno por cada estado de la República. Es el Honorable Congreso de la Unión del Dolor que inició sesiones este histórico viernes 10 de junio del 2011, en la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez.
Son varias mesas en las que se trata desde la justicia hasta los indígenas. Desde educación hasta pobreza. Duran más de tres horas. El borrador del pacto por la paz queda listo, entre prisas y agendas encontradas. Que sí al juicio político, piden unos. Mientras otros tienen sus reservas.
Cae la noche. Y luego de más historias, entre lágrimas, aplausos, banderas blancas y la bandera de México, Javier Sicilia firma en frente del Monumento a Benito Juárez, a las 9:54 de la noche (tiempo local), 10:54 tiempo del centro del país, el Pacto Ciudadano por la Paz con Justicia y Dignidad, que recoge el dolor y el miedo de miles de mexicanos. Una esperanza para los vivos en el país de los, entonces, 40 mil muertos a los que la justicia los ha olvidado. Pero sus familias no.

jueves, 12 de mayo de 2011

''¡Aquí no queremos putos... y menos, con sida!"



Mónica Tirado Jarillo *Texto y foto

De semblante despreocupado, vestido con ropa deportiva y decenas de papales en las manos, Óscar Sánchez de 36 años, platicó su historia: era contador público pero hace dos semanas se incorporó a la estadística de desempleados. Había trabajado por 4 años en la Secretaría de Hacienda y Crédito Público cuando un día lo citó su supervisor en su oficina y le dijo que estaba despedido. Sánchez pidió una razón y obtuvo respuesta: “¡Aquí no queremos putos, y menos con SIDA!”.

La contestación lo dejó helado…No se explica de qué manera se habían enterado de su padecimiento, el cual le había sido diagnosticado hace un año, y mucho menos que éste fuera determinante para seguir laborando en dicha dependencia.

Pronto se movilizó para hacer valer sus derechos: “se las voy a armar en grande, porque no se vale que me corran así nada más”. Asegura que lleva cerca de dos semanas recorriendo delegaciones y oficinas, visitando licenciados que evalúan su caso con la falsa promesa de remunerarle lo perdido.

Como Óscar cientos de personas son discriminadas por sus preferencias sexuales y su apariencia física; Según la Comisión Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred) en 2009 se dio seguimiento a 39 procedimientos de presuntos actos de discriminación hacia homosexuales, sin embargo en 2010 la cifra aumentó a 166. Lo que demuestra que aunque el 2010 fue el año en que la comunidad homosexual logró el derecho al matrimonio, el rechazo social hacia este sector fue más agresivo.    

Para fortuna de este sector poblacional, el 10 de enero de 2011 inició operaciones  la Unidad Especializada para la Atención de Usuarios de la Comunidad Lésbico Gay Bisexual Transexual Transgénero Travesti Intersexual (LGBTTTI), presidida por el licenciado Javier Gómez Bastida, quien es el Responsable de Agencia y comenta que el propósito de esa unidad es atender los delitos que competan o involucran al círculo LGBTTTI.

Con cigarro en mano, Gómez Bastida comenta que desde su creación se han reportado cerca de 100 delitos pero que esta cantidad no se compara con los llamados delitos “vedados” que son aquellos que no se reportan y entre las causas por las cuales los afectados no denuncian  es porque muchos aún no se atreven a ‘salir del clóset´ por miedo o pena con su familia, amigos, compañeros de trabajo y la sociedad en general así como el desconocimiento sobre la existencia de la Unidad.  

El titular de la unidad asegura que ha sido difícil construir una red de comunicación entre las autoridades y las víctimas ya que poco se ha hablado de su formación y asegura que falta difusión: “pertenezco a la comunidad gay y no sabes el gusto que les da saber que ya hay autoridades encargadas de ver por ellos, se quedan impresionados".

 “Es muy diferente ir a denunciar a un MP normal, que venir con nosotros a nuestra unidad, la mayoría de los agentes son insensibles hacia nosotros y recibimos insultos y malos tratos, aquí eso no pasa”, apunta Martha Asencio, asistente de Gómez Bastida quien también pertenece al movimiento LGBTTTI y se asume como lesbiana y que busca a través de esta unidad garantizar la protección de quienes son víctimas de agresiones físicas o verbales. 

En tanto, esta instancia está adscrita orgánicamente a la coordinación territorial Cuauhtémoc 5  (CUH-5) y formará parte del Centro Comunitario de Atención a la Diversidad Sexual, y en ella según el acuerdo A/023/2010 publicado en la Gaceta Oficial del Distrito Federal el 30 de noviembre pasado, laboran  servidores públicos capacitados sobre los derechos de la población homosexual además de que como en el caso del Responsable de la Agencia y su asistente pertenecen a la comunidad LGTTTBI y fue puesta en marcha por la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF).   

En la calle de Génova#30  en pleno corazón de la Zona Rosa, la Unidad recibe delitos relacionados con la comunidad y según sus cifras los más comunes son el de robo, y después el de discriminación verbal aunque en menor medida porque no se atreven a denunciar, desde su creación se han reportado cerca de 100 delitos con detenido y sin detenido.

El Responsable de la Agencia afirma que aunque esa cifra represente un logro para la agencia, representa una cantidad mínima ya que los llamados “delitos velados”, los que aún no se denuncian por la desconfianza al Ministerio Público porque no se atreven a asumir su homosexualidad  por miedo y vergüenza de sus familiares, amigos, pareja o de la misma sociedad son víctimas de burlas o lesiones donde se proyecte su orientación sexual y como consecuencia de esto, guardan silencio y no acuden con las autoridades.

Javier Gómez comenta que los hombres y mujeres deben de asumir su orientación y preferencias sexuales para que México, sobre todo el Distrito Federal sea un lugar lleno de pluralidades con cabida para todas as ideas y expresiones.

“Ya hay un MP que busca la sensibilidad y se preocupa por los usuarios de la comunidad, cuando les tendemos la mano se quedan sorprendidos por la atención y en gran medida porque nunca imaginaron que las autoridades se interesarán en ellos”.

Prueba del efecto de aplicar la justica está el caso de Jacqueline, un travesti de 30 años que fue víctima por parte de los abusos de su pareja. Al principio la relación fluía muy bien, incluso se fueron a vivir juntos, pero después de cinco meses de “luna de miel”, las groserías y empujones fueron una constante.

Gómez Bastida narra que la pareja de Jacqueline le exigía dinero ya que estaba desempleado y le gustaba tomar y la buena vida. Cuando ella se negó, las cachetadas, golpes e incluso amenazas de muerte fueron un calvario que soportó por unos días hasta que decidió abandonarlo.

Ya separados, él le seguía exigiendo dinero y le llamaba a su celular para molestarla hasta que por medio de unas amigas se enteró de la Unidad Especializada para la Atención de Usuarios de la Comunidad Lésbico Gay Bisexual Transexual Transgénero Travesti Intersexual (LGBTTTI) y acudió a solicitar sus servicios.

La Unidad preparó un operativo; Jacqueline se citó con su ex pareja para entregarle un monto de dinero y cuando éste apreció, fue aprehendido y posteriormente presentado a las autoridades correspondientes. Ahora el proceso está en trámite y el victimario de Jacqueline tras las rejas en el penal de Santa Martha Acatitla esperando su sentencia. Sin embargo las lesiones, rasguños y moretones son visibles aún en el cuerpo de esta joven, que gracias a la Unidad Especializada volvió a renacer.  

En México desde 2001 en el artículo 1 de la Constitución el derecho a la no discriminación de las personas es reconocido, desde entonces se han logrado avances para reconocer los derechos de grupos discriminados en el país, entre ellos los homosexuales. En 2003 la Ley Federal para Prevenir y Eliminar la Discriminación fue aprobada, pero este progreso no es suficiente ya que sólo en 13 entidades la discriminación es un delito.

Y lo más grave es que para muchos mexicanos discriminar no representa una falta o motivo de sanción, así lo refleja la Encuesta Nacional sobre Exclusión, Intolerancia y Violencia en las Escuelas de Educación Media Superior (2007-2008) que señala lo siguiente:54% de los estudiantes dijeron que rechazan a un compañero enfermo de SIDA, 52.8% a los no heterosexuales y 51.1% a quienes tienen capacidades diferentes.

Para Javier Gómez es cuestión de educar no de imponer y, a través de la educación y  la conciencia, México será un país de mentes abiertas con proyección al futuro y cercanía humana. “Sólo aceptándose como son lograrán igualdad y respeto hacia sus derechos”, apuntaló.


Emilia Fraijo y su fiesta muerta



Marco A. Bravo  *Texto y foto

No se pudo realizar la fiesta. Las  cinco velas del pastel  no se prenderán,  la piñata no recibirá ningún golpe, no se escucharán las risas ni se verá el correr de los niños; el confeti y los globos permanecerán en la tienda. La celebración de cumpleaños que Abraham Fraijo Razcón deseaba realizar cada año para su pequeña Emilia, será imposible ante su ausencia.

Emilia Fraijo Navarro debió celebrar sus cinco años de vida con familia y amigos, en marzo pasado. No fue así. Ahora solo se recuerda su fallecimiento y el de 48 niños y niñas tras el incendio de la Guardería ABC en Hermosillo, Sonora, ocurrido el 5 de julio del 2009.  

La vida de Abraham tiene, a partir de esa fecha, un sello de amargura e indignación, una marca que también se refleja en su piel, con dos tatuajes del nombre de su difunta hija, contorneados por catarinas que evocan el disfraz de fiesta que utilizó Emilia en alguno de sus aniversarios.

Los días compartidos entre Emilia y Abraham forman un  pasado feliz; para el presente, solo queda melancolía de aquellas anécdotas, las cuales imprimen nerviosismo en la pasión fotográfica del padre; lo hacen titubear en instantes en los que tiene que apretar el botón de la cámara para obtener la fotografía,  sin embargo las imágenes capturadas revelan que  su  inspiración la encuentra en su pequeña.

Año tras año  se conmemora la tragedia de Hermosillo, los minutos de silencio en su honor no faltan por aquellas personas consientes que expresan su sentir al gritar: “Ni perdón, ni olvido”. Sin embargo lo único que tiene vida es la impunidad.

La “Guardería”, escenario en donde se desarrolló el incendio, era  una bodega improvisada para el cuidado de los infantes entre once meses y cuatro años de edad, instaladas por contratos corruptos e ilegales emitidos por el Instituto Mexicano del Seguro Social en donde los responsables que pudieron haber prevenido los decesos de los infantes menores, viven libres, sin cargos judiciales y algunos de ellos continúan en el ámbito gubernamental.

Los proyectos de los padres para festejar los cumpleaños de sus hijos muertos han sido sustituidos por la organización de marchas, protestas y acciones ciudadanas en donde reclaman, con rabia, justicia, tras el olvido que las autoridades federales y estatales han mostrado en este caso.

La  marcha más reciente en el Distrito Federal se efectuó el pasado 5 de marzo en las escaleras del Ángel de la Independencia, con banderas azules y rosas ondeando en la parte baja de este monumento, en donde se pasó lista de los niños muertos, tras nombrar cada uno de los nombres y apellidos de las víctimas, a lo que las personas solidarias y simpatizantes de la causa respondían con la frase: ¡No debió morir¡

ESPINILLAS: La otra cara de Peña Nieto


Staff Político

En estos tiempos, para ser un “buen político” hay que aprender a ser un buen “doctor”... con especialidad en cirugía plástica. Hay, pues, que saber operar a tiempo; o mínimo, poder cambiar de piel, cual vulgar camaleón.

El gobernador del Estado de México, Enrique Peña Nieto, demostró ser de esos cuando, con fino bisturí, operó la cara del alcalde con licencia de Ecatepec, Eruviel Ávila, para que se convirtiera en el candidato de unidad del PRI al gobierno de “su” territorio.

Pasó enero, febrero y parte de marzo del 2011, para saber, por fin, que Eruviel sería el candidato. Se decidió de último momento, pero no improvisadamente. Hubo alguien importante que cargó los dados para este lado y no para el de Alfredo del Mazo, con el que muchos, como el periodista Salvador García Soto -de EL UNIVERSAL-, resbalaron en la suerte de adivinos que intentaron ser.

Aquella columna del Nostradamus fracasado se llamó “Del Mazo candidato: ganó la marca”. Esto es parte de lo que Soto afirmaba el 20 de marzo de este año: “En un duelo de estrategias, este domingo se producirán dos hechos claves en la contienda por la gubernatura del Estado de México: por un lado la Consulta Ciudadana con la que el PAN y el PRD preguntarán si deben o no ir en alianza a los comicios y, por otro lado, la nominación del candidato a gobernador por el PRI, que recaerá en la persona de Alfredo del Mazo Maza (…).

“Ayer por la noche hubo una reunión en Toluca, encabezada por el propio Peña Nieto, donde le informaron ya a Del Mazo que sería el candidato, y a Eruviel Ávila, alcalde de Ecatepec… le ofrecieron ser el dirigente del PRI en el estado (…). Es claro que el “gran elector”, Enrique Peña Nieto, optó por quien le garantiza la cercanía y confianza. Es indudable que pesó también la alcurnia política... A decir de cercanos al Palacio de Gobierno de Toluca, Del Mazo no sólo tenía un apellido que es casi “marca registrada” en el Estado de México (…).

Esto es lo malo de jugarle al adivino, siendo periodista, y de tener nada más una fuente que respalde lo dicho. Pero dejemos a Soto. Vamos al grano mexiquense.

Dos personas le dieron el “sí” a Eruviel y una de esas dos dijo tajantemente que “no” a Alfredo; se trata del ex presidente Carlos Salinas de Gortari y la maestra Elba Esther Gordillo, respectivamente. Ambos formaron parte del pequeño círculo que definió con qué cara saldría el PRI a enfrentar al candidato de facto de la izquierda, Alejandro Encinas, impulsado por Andrés Manuel López Obrador y el jefe de Gobierno, Marcelo Ebrard.

Tras el humo blanco en el estado, Ávila se presentó ante todo México como el hijo de un conductor de microbuses; como el joven que entró al Ayuntamiento de Ecatepec para hacer su servicio social y ¡miren en lo que terminó!; una persona humilde; un priista y mexiquense de corazón.

Después de derramar una lágrima con dicho currículum, podemos afirmar que esta es la otra cara de Peña Nieto, quien por cierto busca heredarle su puesto. El próximo 3 de julio se sabrá si sirvió la operación del Grupo Atlacomulco. O, ya de plano, están fallando los doctores tricolores. Y, peligro, viene el 2012.

@politicaseptien

¡Estamos hasta la madre!


Con el ánimo de que el texto no quede en el olvido, La Política reproduce la carta del poeta jubilado, la cual, más que ocho mil caracteres, envuelve un sentimiento si no es que generalizado, sí de una buena parte de la dolida y temerosa sociedad mexicana. 


MÉXICO, DF., 3 de abril (Proceso).- El brutal asesinato de mi hijo Juan Francisco, de Julio César Romero Jaime, de Luis Antonio Romero Jaime y de Gabriel Anejo Escalera, se suma a los de tantos otros muchachos y muchachas que han sido igualmente asesinados a lo largo y ancho del país a causa no sólo de la guerra desatada por el gobierno de Calderón contra el crimen organizado, sino del pudrimiento del corazón que se ha apoderado de la mal llamada clase política y de la clase criminal, que ha roto sus códigos de honor.

No quiero, en esta carta, hablarles de las virtudes de mi hijo, que eran inmensas, ni de las de los otros muchachos que vi florecer a su lado, estudiando, jugando, amando, creciendo, para servir, como tantos otros muchachos, a este país que ustedes han desgarrado. Hablar de ello no serviría más que para conmover lo que ya de por sí conmueve el corazón de la ciudadanía hasta la indignación. No quiero tampoco hablar del dolor de mi familia y de la familia de cada uno de los muchachos destruidos. Para ese dolor no hay palabras –sólo la poesía puede acercarse un poco a él, y ustedes no saben de poesía–. Lo que hoy quiero decirles desde esas vidas mutiladas, desde ese dolor que carece de nombre porque es fruto de lo que no pertenece a la naturaleza –la muerte de un hijo es siempre antinatural y por ello carece de nombre: entonces no se es huérfano ni viudo, se es simple y dolorosamente nada–, desde esas vidas mutiladas, repito, desde ese sufrimiento, desde la indignación que esas muertes han provocado, es simplemente que estamos hasta la madre. 

Estamos hasta la madre de ustedes, políticos –y cuando digo políticos no me refiero a ninguno en particular, sino a una buena parte de ustedes, incluyendo a quienes componen los partidos–, porque en sus luchas por el poder han desgarrado el tejido de la nación, porque en medio de esta guerra mal planteada, mal hecha, mal dirigida, de esta guerra que ha puesto al país en estado de emergencia, han sido incapaces –a causa de sus mezquindades, de sus pugnas, de su miserable grilla, de su lucha por el poder– de crear los consensos que la nación necesita para encontrar la unidad sin la cual este país no tendrá salida; estamos hasta la madre, porque la corrupción de las instituciones judiciales genera la complicidad con el crimen y la impunidad para cometerlo; porque, en medio de esa corrupción que muestra el fracaso del Estado, cada ciudadano de este país ha sido reducido a lo que el filósofo Giorgio Agamben llamó, con palabra griega, zoe: la vida no protegida, la vida de un animal, de un ser que puede ser violentado, secuestrado, vejado y asesinado impunemente; estamos hasta la madre porque sólo tienen imaginación para la violencia, para las armas, para el insulto y, con ello, un profundo desprecio por la educación, la cultura y las oportunidades de trabajo honrado y bueno, que es lo que hace a las buenas naciones; estamos hasta la madre porque esa corta imaginación está permitiendo que nuestros muchachos, nuestros hijos, no sólo sean asesinados sino, después, criminalizados, vueltos falsamente culpables para satisfacer el ánimo de esa imaginación; estamos hasta la madre porque otra parte de nuestros muchachos, a causa de la ausencia de un buen plan de gobierno, no tienen oportunidades para educarse, para encontrar un trabajo digno y, arrojados a las periferias, son posibles reclutas para el crimen organizado y la violencia; estamos hasta la madre porque a causa de todo ello la ciudadanía ha perdido confianza en sus gobernantes, en sus policías, en su Ejército, y tiene miedo y dolor; estamos hasta la madre porque lo único que les importa, además de un poder impotente que sólo sirve para administrar la desgracia, es el dinero, el fomento de la competencia, de su pinche “competitividad” y del consumo desmesurado, que son otros nombres de la violencia. 

De ustedes, criminales, estamos hasta la madre, de su violencia, de su pérdida de honorabilidad, de su crueldad, de su sinsentido. 

Antiguamente ustedes tenían códigos de honor. No eran tan crueles en sus ajustes de cuentas y no tocaban ni a los ciudadanos ni a sus familias. Ahora ya no distinguen. Su violencia ya no puede ser nombrada porque ni siquiera, como el dolor y el sufrimiento que provocan, tiene un nombre y un sentido. Han perdido incluso la dignidad para matar. Se han vuelto cobardes como los miserables Sonderkommandos nazis que asesinaban sin ningún sentido de lo humano a niños, muchachos, muchachas, mujeres, hombres y ancianos, es decir, inocentes. Estamos hasta la madre porque su violencia se ha vuelto infrahumana, no animal –los animales no hacen lo que ustedes hacen–, sino subhumana, demoniaca, imbécil. Estamos hasta la madre porque en su afán de poder y de enriquecimiento humillan a nuestros hijos y los destrozan y producen miedo y espanto.

Ustedes, “señores” políticos, y ustedes, “señores” criminales –lo entrecomillo porque ese epíteto se otorga sólo a la gente honorable–, están con sus omisiones, sus pleitos y sus actos envileciendo a la nación. La muerte de mi hijo Juan Francisco ha levantado la solidaridad y el grito de indignación –que mi familia y yo agradecemos desde el fondo de nuestros corazones– de la ciudadanía y de los medios. Esa indignación vuelve de nuevo a poner ante nuestros oídos esa acertadísima frase que Martí dirigió a los gobernantes: “Si no pueden, renuncien”. Al volverla a poner ante nuestros oídos –después de los miles de cadáveres anónimos y no anónimos que llevamos a nuestras espaldas, es decir, de tantos inocentes asesinados y envilecidos–, esa frase debe ir acompañada de grandes movilizaciones ciudadanas que los obliguen, en estos momentos de emergencia nacional, a unirse para crear una agenda que unifique a la nación y cree un estado de gobernabilidad real. Las redes ciudadanas de Morelos están convocando a una marcha nacional el miércoles 6 de abril que saldrá a las 5:00 PM del monumento de la Paloma de la Paz para llegar hasta el Palacio de Gobierno, exigiendo justicia y paz. Si los ciudadanos no nos unimos a ella y la reproducimos constantemente en todas las ciudades, en todos los municipios o delegaciones del país, si no somos capaces de eso para obligarlos a ustedes, “señores” políticos, a gobernar con justicia y dignidad, y a ustedes, “señores” criminales, a retornar a sus códigos de honor y a limitar su salvajismo, la espiral de violencia que han generando nos llevará a un camino de horror sin retorno. Si ustedes, “señores” políticos, no gobiernan bien y no toman en serio que vivimos un estado de emergencia nacional que requiere su unidad, y ustedes, “señores” criminales, no limitan sus acciones, terminarán por triunfar y tener el poder, pero gobernarán o reinarán sobre un montón de osarios y de seres amedrentados y destruidos en su alma. Un sueño que ninguno de nosotros les envidia. 

No hay vida, escribía Albert Camus, sin persuasión y sin paz, y la historia del México de hoy sólo conoce la intimidación, el sufrimiento, la desconfianza y el temor de que un día otro hijo o hija de alguna otra familia sea envilecido y masacrado, sólo conoce que lo que ustedes nos piden es que la muerte, como ya está sucediendo hoy, se convierta en un asunto de estadística y de administración al que todos debemos acostumbrarnos. 

Porque no queremos eso, el próximo miércoles saldremos a la calle; porque no queremos un muchacho más, un hijo nuestro, asesinado, las redes ciudadanas de Morelos están convocando a una unidad nacional ciudadana que debemos mantener viva para romper el miedo y el aislamiento que la incapacidad de ustedes, “señores” políticos, y la crueldad de ustedes, “señores” criminales, nos quieren meter en el cuerpo y en el alma.

Recuerdo, en este sentido, unos versos de Bertolt Brecht cuando el horror del nazismo, es decir, el horror de la instalación del crimen en la vida cotidiana de una nación, se anunciaba: “Un día vinieron por los negros y no dije nada; otro día vinieron por los judíos y no dije nada; un día llegaron por mí (o por un hijo mío) y no tuve nada que decir”. Hoy, después de tantos crímenes soportados, cuando el cuerpo destrozado de mi hijo y de sus amigos ha hecho movilizarse de nuevo a la ciudadanía y a los medios, debemos hablar con nuestros cuerpos, con nuestro caminar, con nuestro grito de indignación para que los versos de Brecht no se hagan una realidad en nuestro país. 

Además opino que hay que devolverle la dignidad a esta nación.

jueves, 7 de abril de 2011

Hallan 59 cuerpos en Tamaulipas... justo el día en que miles exigían paz en México

INFORMACIÓN DE SDPNOTICIAS.COM

1- Este miércoles fueron hallados 59 cuerpos de mexicanos, enterrados en fosas clandestinas en San Fernando, Tamaulipas... justo el día en el que en más de 18 ciudades del país exigieron el cese de la violencia y emplazaron al Estado mexicano a brindar mayor seguridad a los ciudadanos.

2- En San Fernando ya habían sido encontrados 72 cuerpos de inmigrantes el año pasado... ahora, la Secretaría de Gobernación -tras un sin fin de llamadas- aseguró que se trataba de residentes en este país.

3- Cuernavaca, Morelos, fue el epicentro del reclamo. Desde ahí, el líder de todas las manifestaciones, el poeta jubilado -tras el asesinato de su hijo- Javier Sicilia condenó que los criminales hayan eliminado cualquier "código de honor" y los llamó "pinches narcos".

miércoles, 6 de abril de 2011

La DEA ve como una "señal de éxito" el incremento de la violencia en México


INFORMACIÓN DE MILENIO
1- El incremento de la violencia, aunque parezca lo contrario, es una “señal de éxito” de la lucha contra los cárteles del narcotráfico, dijo Michelle Leonhart, directora de la Administración Antidrogas de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés).
2- Estos avances permiten al gobierno de Estados Unidos ser optimista porque “nuestros socios mexicanos no han cedido” ante los grupos del crimen organizado, agregó Leonhart. “Hubo 15 mil muertos el año pasado (…) y podría parecer lo contrario, pero el mayor nivel de violencia que estamos viendo en México es una señal de éxito”, recalcó la titular de la DEA, quien llamó a mantener la presión contra los cárteles “en todos los frentes” para que “sientan el calor”.
3- Acompañada del saliente embajador de Estados Unidos en México, Carlos Pascual, y el titular de la SSP, Genaro García Luna, a quien denominó “uno de los mejores policías del mundo”, Leonhart enfatizó que la presión que el gobierno mexicano aplica sobre las organizaciones delictivas ha dado resultados tangibles, como el incremento del valor de la cocaína en algunas ciudades de su país (derivado de la escasez) y la caída en su pureza.
“Tenemos razones en la DEA para ser optimistas, porque nuestros socios mexicanos no han cedido. Estamos muy optimistas. Muchos líderes (del narco) han sido extraditados a Estados Unidos y hemos logrado desarticular organizaciones completas. El poder de los cárteles cambiará y hemos visto señales de que está cambiando". 

martes, 5 de abril de 2011

No se dan abasto: narco destruye plaza comercial de Acapulco



INFORMACIÓN DE REFORMA.COM
1- Primero, incendiaron un tianguis; luegos, un grupo de sicarios enfrentó a militares y policías, lo que dejó como saldo tres muertos y cuatro lesionados, además de la destrucción de un súper y otros locales comerciales, que fueron escenario de los enfrentamientos en Acapulco, Guerrero. 
2- Entre los fallecidos se encuentra un teniente de infantería, Abel Cruz Leocadio, de 28 años, y dos criminales, mientras que dos policías y dos sicarios resultaron lesionados en la refriega. Siete delincuentes fueron detenidos.
3- Los hechos iniciaron alrededor de las 4 de la madrugada, cuando un grupo de gatilleros prendió fuego a puestos del “AcaTianguis”, un mercado irregular donde se expende mercancía pirata. En un rondín de vigilancia, elementos del grupo Bases de Operaciones Mixtas Urbanas (Bomu) se percataron del fuego. Fueron recibidos a balazos por los sicarios, justo detrás de la bodega de la Comercial Mexicana, sobre el bulevar Vicente Guerrero, que se convierte en la carretera México-Acapulco.Las balas y al parecer el estallido de granadas provocaron un incendio en el súper, que registró la pérdida de 100 por ciento de su mercancía. Otros locales, como una tienda Radio Shack y un restaurante Pizza Hut, sufrieron daños parciales. En medio del enfrentamiento, al menos cinco pistoleros se refugiaron en el Hotel Marcial, cuya fachada quedó con decenas de impactos de bala. La balacera y una posterior persecución duraron cerca de una hora.
La refriega concluyó en la Colonia Ciudad Renacimiento, en la calles Juan R. Escudero e Ignacio Manuel Altamirano, cerca de las instalaciones del Laboratorio estatal de Salud Galo Soberón.
Ahí quedaron los cuerpos sin vida de dos sicarios, cerca de dos camionetas con el motor encendido y los vidrios destrozados. Todo, como parte de "la guerra" contra el narco. 
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lunes, 4 de abril de 2011

Inician precampañas en el Edomex; Encinas, con AMLO y Ebrard; Bravo, con gabinete de Calderón; Eruviel Ávila, "solo"



1- Alejandro Encinas comenzó formalmente su precampaña en territorio priista. Estuvo ayer primero en Ecatepec -justo frente al Palacio Municipal- acompañado por el dirigente del PRD, Jesús Zambrano, la secretaria general, Dolores Padierna y, quien organizó el mitin, el Jefe de Gobierno del DF, Marcelo Ebrard. Por la tarde, acompañó a Andrés Manuel López Obrador a Toluca, quien dijo que ganará la elección del próximo 3 de julio.

2- Luis Felipe Bravo Mena inició desde el sábado su precampaña... pero fue ayer cuando contó con la plana mayor del gabinete federal de Felipe Calderón; cabe señalar que Bravo "renunció" a la secretaría particular de la Presidencia de la República para poder contender en las próximas elecciones a gobernador en el Estado de México. (FOTO: Tomada del twitter de Javier Lozano).

3- Eruviel Ávila no se hizo acompañar de figuras importantes del priismo nacional para iniciar su precampaña. Eso sí, congregó una gran cantidad de personas en los diferentes actos que tuvo.

lunes, 28 de marzo de 2011

Ya basta de sangre... ¿hijos de puta?

Staff Político



Gran polémica se desató tras la campaña iniciada, a principios de este 2011, por algunos de los más importantes caricaturistas de este país. “Ya basta de sangre”, exigían con diferentes cartones. Uno de los más reproducidos fue el de Alejandro Magallanes, que omitía la palabra final en cuestión, pues prefirió bañar de tinta roja la publicación. Como se ha llenado, no de tinta, sino de sangre, el país, en el que 30 mil muertos en cuatro años, relacionados a la guerra contra el narcotráfico -orquestada por el actual gobierno-, se entierran en el encabezado de una primera plana de cualquier periódico del país.

Pero más tardaron en organizar la campaña que en salir los detractores de ésta. Algunos se colgaron de un escrito del analista de derecha, Héctor Aguilar Camín, en el que se sentenciaba: “No hay una condena moral sistemática contra los asesinos, que son los responsables de la sangre y de las ejecuciones y de los decapitados. ¡Esos son los hijos de puta! ¡Volteémonos contra ellos! Y reclamémosle al Estado, obviamente, ser tan ineficaz con la seguridad que está obligado a dar. Pero los hijos de puta, son los hijos de puta”.

No nos gustaría usar el término como tal, por ello sólo lo utilizamos para la cabeza de este editorial y reproducimos las palabras del autor. ¿Por qué? ¡Qué necesidad! Son narcotraficantes, criminales, delincuentes, gente sin escrúpulos (algunos). El calificativo parece más un arranque de machismo retador que la conclusión de un análisis serio.

¿Voltearnos contra ellos? ¿Quién se apunta primero? Y es que quién, ¡quién!, cuando sepa que alguien es narcotraficante, se va a poner a reclamarle. ¿Tú, Héctor? ¿Tú serás el primero en pedir, de frente, cuentas a los narcotraficantes? Y, si se las pides, ¿qué crees que te respondan? Las AK-47 no las traen de adorno.

Para defender la campaña, nada mejor que las palabras del @Monerohernandez, de La Jornada: “Se sorprenden de que no dirijamos nuestra campaña a los propios delincuentes, únicos culpables de todas las muertes, y parecen eximir a Calderón de toda responsabilidad.

A los delincuentes no se les debe combatir con campañas ni con epítetos machistas, se les enfrenta conforme a derecho, se les investiga, aprehende, juzga y condena.
De manera eficaz e inteligente, no selectiva y engañosa. Y hay una autoridad que supuestamente nos representa a todos, que es la responsable de ello. Eso es lo que exigimos.

Ya basta de sangre es un llamado a la gente a expresarse. A expresar su condena a todos los involucrados en este baño de sangre que suma más de 30 mil muertos en cuatro años. Por desgracia, los delincuentes están haciendo bien su trabajo; por desgracia las autoridades no.

Ya basta de sangre es un llamado a la razón y a la sensatez en contra de la barbarie (…).

…el lema “No más sangre” sirve para exigirle al gobierno que cumpla con el deber fundamental de todo Estado: darle seguridad a sus ciudadanos; que haga lo que está en sus manos para evitar que el baño de sangre siga y se profundice; recordarle que las fallas, desaciertos y errores que comete en este terreno cuestan vidas y causan dolor”.

Sensatez en contra de la barbarie. Un gran propósito para este año. Una vara muy alta para los políticos y algunos analistas mexicanos.

@politicaseptien

Santo y seña*

Marco A. Bravo



Joaquín Guzmán Loera, el Chapo. El 19 de enero del 2001 se metió a un carrito de lavandería que fue cubierto con una sábana y encima le colocaron un colchón. En su celda, para impedir que se pudiera observar a simple vista si permanecía en su estancia, se puso una cortina. Nadie volvió a verlo en la cárcel. Se fugó del Penal de “Puente Grande”. A más de diez años del hecho, y en plena guerra contra el narcotráfico, no han podido capturarlo. O no han querido. Aunque hay un obispo que ha señalado que está en la Sierra de Durango. Hoy comanda el Cártel de Sinaloa. Es uno de los hombres más ricos de México, aunque parezca que se lo tragó la tierra. Tierra de él. En un país de narcos. (Edición: Marco A. Bravo)